Planta vivaz y
trepadora de la familia de las vitáceas, con tronco retorcido, vástagos muy
largos, flexibles y nudosos, hojas alternas, pecioladas, grandes y partidas en
cinco lóbulos puntiagudos; flores verdosas en racimos, y cuyo fruto es la uva.
Originaria de Asia, se cultiva en todas las zonas templadas.
Buscar la definición de cualquier
palabra en el Diccionario de la Lengua de la Real Academia Española suele verse
recompensado, a veces, con un texto tan frío, distante y académico. Se trata de
la vid, tal vez la planta más presente en el paisaje manchego.
Si
ahondamos más en las profundidades de los libros, descubriremos hermosas
palabras como zarcillo, sarmientos, cepas, pámpana, filoxera, vendimia,
fudres... La frase campesina los bueyes del agua fue recogida por García Lorca en uno de sus
poemas. Algo sustancialmente poético y parecido sucede cuando el viticultor
dice que las viñas lloran o que las cepas se están llenando de
mariposas, para explicar que la savia está inundando los sarmientos y que
están apareciendo las pámpanas. Ejemplos hay que hablan de la perfecta integración
del ser humano con su medio, del profundo conocimiento que tiene de los
procesos vitales que se producen en su entorno y de la necesaria adaptación de
la labor humana a estos procesos.
Con este pequeño proyecto hemos
querido aproximarnos al paisaje manchego, a la interacción del ser humano con
el medio, a la utilización de máquinas y herramientas, a la belleza que se
encierra entre la tierra y el esfuerzo de las personas, a la forma de festejar
por la satisfacción del trabajo bien hecho. Para ello recrear en la escuela con
elementos naturales, jugar, propiciar experiencias de primera mano, contar,
cantar y bailar.