lunes, 13 de febrero de 2017

Taller de cocina.

Isabel, la mamá de Valeria, nos propone un taller de cocina. Vamos a realizar una piruleta de chocolate decorada con caramelos. La receta es fácil, pero hay que saber cuales son los ingredientes, los pasos a seguir, el resultado que queremos obtener...esto se parece mucho a un problema de lógica, y es que un taller de cocina es una manera divertida de desarrollar la competencia matemática.

Un taller de cocina siempre es, sí mismo,  atractivo para los niños. Las cosas que en él se realizan son diferentes a las tareas típicas de la escuela, a todos los niños les gusta. Descubrir este taller es fascinante para todos. Conocer una receta es un procedimiento en el que hay que manipular ingredientes, hablar y decir sus características, conocerlos, elaborar la receta y por último probar su propia obra.

A través de los talleres podemos trabajar todos los contenidos del currículo utilizando los diferentes lenguajes, de forma integrada y globalizada incidiendo más en un lenguaje u otro en función de la temática del taller. 

Los talleres:
  • Atiende la globalidad del niño y de la niña. 
  • Sigue sus intereses y motivaciones, partiendo de “lo que el niño quiere hacer”. 
  • Toma como referente el modelo constructivista, conectando cada nueva actividad con los conocimientos previos del alumno.
  • Potencia el trabajo cooperativo. 
  • En la planificación de cada taller, participan tanto los alumnos y alumnas como los padres y madres que lo desean. 
  • La ejecución de las tareas es una continua experimentación y autoevaluación.
  • Este tipo de trabajo permiten al alumnado seguir su propio ritmo.
  • Facilita la generalización de lo aprendido al aplicar las técnicas y aprendizajes conseguidos en una situación, al ejecutar la tarea concreta propuesta.
  • Fomentan la capacidad de análisis de los niños porque observan cómo se hacen las cosas, sus características...
  • Al centrarse en la vida cotidiana, la coeducación o la educación para la salud, son un hecho.











Muchas gracias a Isabel por preparar con tanto esmero esta experiencia, por su calidez y disponibilidad para con los protagonistas de la escuela, que no son otros, que las niñas y los niños.