A lo
largo de toda la historia de nuestra especie y en todas las culturas, entre las
técnicas de maternaje están la enseñanza-aprendizaje de juegos grupales. Los
juegos populares son fruto de la sabiduría de un pueblo. Dentro de este gran
paquete de juegos, encontramos algunos a los que llamamos tradicionales, ya que
son juegos populares que han sobrevivido al tiempo, pasando de generación en
generación hasta llegar, muchos de ellos, hasta nuestros días.
Suponen
un buen aprendizaje de acercamiento al otro; son una escuela de convivencia,
porque todos ellos se juegan entre varios niños y buena parte de ellos en el
seno de un grupo; se ha de escoger quien la liga o quien se salva, se han de
hacer equipos, hay que ponerse de acuerdo, decidir. En definitiva, en muchos
aspectos, los juegos populares comunican ritos y formas mágica de comprender e
intervenir en la realidad, se manifiestan como un camino iniciático, vestigios
de antiguos saberes, mecanismos de culturización que preparan para la vida
adulta.
Ana
y Diego, los papás de Diego Cerezo, han venido hoy al cole cargados de muchos
juegos tradicionales… juegos de hilera, juegos con objeto, juegos con
cancioncilla asociada, juegos…, el juego siempre el juego, el placer de ser y
de sentirse único y a la vez integrante del grupo, el placer de hacer por
hacer, sin esperar resultados.
Gracias
a Diego y Ana por propiciar la actividad más importante del niño, JUGAR.
